Psoriasis en niños: ¿cómo afecta a su desarrollo?

La psoriasis es una enfermedad inflamatoria crónica de la piel que afecta a alrededor del 2% de la población mundial. Se caracteriza por la aparición de placas rojas, escamosas y pruriginosas en diferentes partes del cuerpo, que pueden causar molestias, dolor y vergüenza a quienes la padecen.

La psoriasis puede manifestarse a cualquier edad, pero es más frecuente en la adultez. Sin embargo, se estima que entre el 10 y el 15% de los casos se inician antes de los 10 años, y que alrededor del 1% de los niños menores de esa edad tienen psoriasis.

La psoriasis en niños tiene un impacto negativo en su calidad de vida, ya que puede afectar a su desarrollo físico, emocional y social. Algunas de las consecuencias que puede tener esta enfermedad en los niños son:

  • Alteraciones en el crecimiento y el desarrollo óseo. La inflamación crónica puede provocar un retraso en el crecimiento y una menor densidad mineral ósea, lo que aumenta el riesgo de fracturas y osteoporosis en el futuro.
  • Problemas en la piel y las uñas. La psoriasis puede causar sequedad, descamación, fisuras, infecciones y alteraciones en el color y la forma de las uñas, lo que puede afectar a la autoestima y la confianza de los niños.
  • Trastornos psicológicos y emocionales. La psoriasis puede generar estrés, ansiedad, depresión, baja autoestima, aislamiento social y dificultades para relacionarse con los demás, especialmente con sus pares. Los niños con psoriasis pueden sufrir acoso escolar, rechazo y discriminación por parte de otros niños, lo que puede afectar a su rendimiento académico y a su desarrollo personal.
  • Comorbilidades asociadas. La psoriasis es una enfermedad sistémica que puede estar relacionada con otras patologías como la artritis psoriásica, la obesidad, la diabetes, las enfermedades cardiovasculares y el síndrome metabólico, entre otras. Estas comorbilidades pueden aumentar el riesgo de complicaciones y reducir la esperanza de vida de los pacientes.

Por todo ello, es fundamental diagnosticar y tratar la psoriasis en niños lo antes posible, para evitar o minimizar sus efectos negativos en su salud y su bienestar. El tratamiento debe ser individualizado y adaptado a las características y necesidades de cada niño, teniendo en cuenta la extensión, la gravedad y el tipo de psoriasis, así como la edad, el peso y las preferencias del paciente.

El tratamiento de la psoriasis en niños puede incluir medidas generales como el cuidado e hidratación de la piel, la exposición moderada al sol o la fototerapia, y el uso de medicamentos tópicos como corticoides, análogos de la vitamina D o retinoides. En los casos más graves o refractarios al tratamiento tópico, se pueden emplear medicamentos sistémicos como metotrexato, ciclosporina o biológicos.

Además del tratamiento médico, es importante brindar apoyo psicológico y educativo a los niños con psoriasis y a sus familias, para ayudarles a afrontar la enfermedad y a mejorar su calidad de vida. En Aruxa Beauty Center contamos con un equipo multidisciplinar de profesionales especializados en dermatología y cirugía estética que te ofrecen un servicio integral y personalizado para tratar tu psoriasis o la de tu hijo. Contacta con nosotros y te asesoraremos sin compromiso.

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